dimarts, de juny 12, 2007

Relato muy breve

Miró por la ventana. El mar estaba en calma. Soplaba una ligera brisa que impulsaba el barco de regreso a puerto. Miró la gente paseando por el paseo marítimo, a las parejas tumbadas en la playa besándose.

Se volvió a la cama vacía.

Una lágrima resbaló por su mejilla al mar. Las ondas de su lágrima se expandieron por el agua calmada del mar, junto a las flores que puso por él

Ya nunca volvería. Su barco se hundió.
Las lágrimas de ella se mezclaban con el agua que guardaba el cuerpo de su amado en las profundidades. Las flores crecían hermosas bajo la ventana desde la que ella contemplaba la vida y entregaba su llanto al mar.
Su vida se había hundido con el barco de él.
Se tumbó en la calle, desnuda.
Cerró los ojos.
Era una muerta con vida


2 comentaris:

Joana ha dit...

Doncs això no és vida!:(
una abraçada!

Robertinhos ha dit...

joana
no, la veritat. A vegades la mort d'algu fa que mori algu altre en vida