dissabte, de juliol 01, 2006

In memoriam

Sé que no el coneixia, sé que sóc incapaz d'associar una cara a Antonio LV. Segur que l'he vist, ja que en la meva formació a FCC vaig veure justament el seu servei de polivalent a la Barceloneta, però encara estic en el punt que no conec als 300 homes i dones amb el mono de BCNeta!. Però estic apenat. M'han despertat per informar-me d'aquesta noticia. Sabia que alguns treballadors anaven amb escorta policial en diversos serveis, sabia que s'havien registrat agresions, però sempre imaginava que eren aventures exagerades en certa forma viscudes fa temps, en zones de Barcelona perilloses (el Rawal, la Mina, etc.)... És el primer cop que després d'anar de festa em desperten per comunicar-me una mort d'un treballador. I m'hagués recomfortat poguer estar en aquest moment amb la família, quan va tindre que anar a l'Hospital de Mar a veure al seu pare, marit estirat sense vida amb un ganivet al cor. Sol volia netejar el lloc dels indigents. Estic segur que no li agradava fer-ho (a ningú li agrada treure la merda dels altres), però era la seva feina. En fi... RIP


VIOLENCIA EN LAS CALLES DE BARCELONA


Una indigente mata a un barrendero en la Barceloneta • La mujer apuñaló al empleado municipal cuando este limpiaba la zona donde ella dormía

Paso de peatones de la calle de Salamanca donde cayó el herido.

R. COMORERA / M. NAVARROBARCELONAUn empleado de la limpieza del Ayuntamiento de Barcelona, Antonio L. V., falleció la pasada madrugada horas después de ser apuñalado en la plaza de Hilari Salvadó de la Barceloneta por una indigente. La agresión mortal se produjo sobre las 20.30 horas, cuando el empleado de la limpieza se disponía a sanear, junto con otros trabajadores municipales y bajo la supervisión de un guardia urbano, el rincón en el que la indigente vivía con su compañero.Mercedes F. D., de 41 años, clavó por sorpresa un cuchillo en el abdomen del barrendero y este salió corriendo en dirección a la calle del Almirall Cervera hasta caer desfallecido en el paso de peatones de la esquina con la calle de Salamanca. Tal y como se comprobó después en el hospital, la puñalada le afectó al corazón. El herido, que estaba consciente, permaneció tendido en el suelo una media hora, según relataron dos testigos de restaurantes de la zona, hasta que llegó una ambulancia y lo llevó al cercano Hospital del Mar. Con anterioridad acudieron numerosos agentes de la Guardia Urbana y de los Mossos d'Esquadra.EL DOBLE DE TIEMPOFuentes del 061 confirmaron a este diario que la ambulancia tardó mucho más de lo deseado. Según su explicación, la central coordinadora de las emergencias sanitarias recibió la primera llamada de petición de la ambulancia a las 20.31 horas. Este primer aviso al 061 fue efectuado por la central de la Guardia Urbana. El primer vehículo sanitario llegó al lugar del apuñalamiento a las 20.50 horas, es decir, 19 minutos después, pese a que el tiempo medio de intervención ante un suceso tan grave es para el 061 inferior a los 10 minutos en el casco urbano de Barcelona, informa Óscar Hernández.Las mismas fuentes reconocieron que a esa hora la ambulancia con médico disponible más cercana se encontraba en el Hospital del Vall d'Hebron, en el extremo opuesto de la ciudad. Las otras estaban realizando otros servicios urgentes. Al final, ante la imposibilidad de que aquella llegara a tiempo, la central del 061 envió otro vehículo sin médico que fue el que trasladó al herido al Hospital del Mar, muy cercano al lugar del suceso.REACCIÓN INESPERADAEl equipo de barrenderos acudía una vez por semana a la plaza de Hilari Salvadó para limpiar el lugar donde vivía la pareja ya que allí mismo hacían sus necesidades. Una vez concluida su labor, la pareja de indigentes se instalaba de nuevo en el rincón. Ayer, sin embargo, la mujer tuvo una reacción inesperada y muy violenta que cogió por sorpresa al guardia que vigilaba la operación de limpieza.Personas que observaron los hechos explicaron que los dos indigentes acostumbraban a beber alcohol y que a menudo tomaban también pastillas y otras drogas. Manoli, como era conocida la mujer en el barrio, solía molestar a transeúntes, vecinos y niños que acudían a la plaza, comportamiento que había motivado numerosas quejas.Los Mossos d'Esquadra se llevaron detenida a la mujer, que tras la agresión mortal lanzó el cuchillo al suelo y se quedó sentada en la plaza.